La poda es una de las épocas más importante para nuestro viñedo, ya que con ella se designan los cortes de los sarmientos, dejando las yemas por donde brotarán los nuevos pámpanos, hojas, frutos ...

Si no se realizase esta operación, la planta adquiriría pronto dimensiones muy amplias, sus sarmientos llevarían abundantes pámpanos, de poco vigor individual, quedando numerosas yemas latentes sin brotar, ya que las reservas acumuladas no son suficientes para producir el brote de todas las yemas. Al tener pocas reservas, los racimos serían pequeños, de maduración tardía y muy heterogéneos.
Por lo tanto, la poda es una de los laboreos más importantes para la obtención posterior de unas uvas sanas, maduras, y sobre todo de calidad para hacer nuestros vinos de calidad. Se ha convertido en la principal herramienta para la regulación, gestión y equilibrio de la planta. A través de la podemos regular la producción de uva, hasta encontrar el equilibrio perfecto suelo-planta-clima.
Los objetivos de la poda son:
1. Formar la planta hacia el sistema de cultivo seleccionado (poda de formación). Durante los tres primeros años, la principal función del viticultor, es conseguir formar la planta al sistema de poda seleccionado para conseguir una adaptación plena de la planta de viña al terreno, dando prioridad al desarrollo de órganos subterráneos, así como a la estructura.
2. Regular el desarrollo vegetativo frente al productivo. A partir del tercer año, podamos para que la planta llegue a un equilibrio vegetativo-productivo. No nos interesa el exceso de vigor que aumentará la cantidad de madera, ni tampoco el exceso de producción, que retrasará la maduración de la uva. Por el contrario, un exceso productivo impedirá desarrollar masa vegetal que garantice una baya madura y de calidad optima.
3. Gestionar la carga productiva, reduciendo el número de yemas, reducimos el número de racimos.
4. Adaptar el cultivo para prevenir emfermedades.
La poda en espaldera facilita los tratamientos sanitarios y su rendimiento. Se ha observado incluso que ciertasenfermedades como la podredumbre gris (Botrytis Cinerea), parece afectar más a las cepas rastreras, tendidas en el suelo con poca aireación, ofreciendo así las condiciones idóneas para el desarrollo del hongo.
- Disminuye el riesgo de mildiú debido a la mejor aireacion de cada planta.
- Facilita las operaciones de cultivo y la poda de invierno, también la vendimia es más fácil, puesto que los racimos se distribuyen con más uniformidad.
- Se intensifica la función clorofílica.
- Se aumenta la resistencia de las plantas a la acción del viento y de otros accidentes climatológicos, aminorando los daños ocasionados por roturas y el riesgo de quemaduras en racimos.
- Mejor maduración de la uva al recibir más directamente el racimo los rayos solares, obteniéndose frutos más sanos y soleados.
